Franco Colapinto: inspiración y compromiso con los jóvenes desde la Experiencia Endeavor Sub 20
En una época en la que los ídolos deportivos suelen estar rodeados de flashes, velocidad y competencia, Franco Colapinto eligió frenar por un momento para dedicar su tiempo —aunque sea a la distancia— a quienes más lo necesitan: los jóvenes que comienzan a construir su futuro.
El piloto argentino, una de las promesas más firmes del automovilismo internacional, participó este martes en la Experiencia Endeavor Sub 20, una jornada pensada para inspirar a estudiantes secundarios de todo el país. Aunque físicamente se encuentra en Europa, preparándose con el equipo Alpine en el simulador de Enstone, Colapinto no quiso estar ausente: su mensaje, transmitido de forma virtual, fue uno de los momentos más destacados del encuentro realizado en el Movistar Arena.
Frente a más de 10.000 estudiantes, el joven piloto compartió una reflexión tan simple como potente: “No dejen de soñar en grande. Ese sueño que parece lejano, en mi caso se cumplió. No hay que temer al error o al fracaso. El único error es no intentar”.
Con humildad y claridad, Colapinto remarcó la importancia de la perseverancia: “No hay tamaño para los sueños. Tal vez se cumplen, tal vez no. Pero lo fundamental es no quedarse con la duda de qué habría pasado si lo hubieras intentado”.
Su intervención fue parte de un evento que reunió a referentes de distintos sectores, como la cantante Nicki Nicole, el CEO de Globant Martín Migoya, Pierpaolo Barbieri (Ualá), y jóvenes fundadores de startups tecnológicas, en una jornada que combinó testimonios, motivación y proyección de futuro.
El futuro de Franco, paso a paso
Mientras la Fórmula 1 se prepara para su fecha en Miami, Colapinto continúa su preparación en el simulador, esperando su oportunidad. Alpine llevará a la pista a Jack Doohan y Pierre Gasly, con Paul Aron como piloto de reserva. El argentino, por su parte, sigue sumando experiencia y demostrando que, incluso fuera de las pistas, puede marcar el rumbo.
En un mundo cada vez más necesitado de ejemplos reales y comprometidos, el gesto de Colapinto trasciende lo simbólico: es una muestra concreta de que el deporte también puede ser motor de inspiración.
Mas ande otro criollo pasa Martín Fierro ha de pasar, Nada la hace recular Ni las fantasmas lo espantan; Y dende que todos cantan Yo también quiero cantar.